La actitud que tomamos frente a los obstáculos que se presentan cotidianamente en nuestras vidas es finalmente lo que determina la dimensión e importancia que le damos a los mismos. A manera de ejemplificar esto, me gustaría compartirles un cuesto sobre dos vendedores de zapatos que viajan a un país muy pobre en busca de nuevas oportunidades de negocios. Uno de ellos, al momento de llegar y ver lo que había a su alrededor, muy triste llamó a su esposa y le dijo:
-Querida, voy de regreso a casa. No hay esperanza, aquí nadie usa zapatos, así que no tengo a quien venderle.
El segundo, al ver aquello se puso feliz y de inmediato llamó a su mujer para decirle:
-Querida, no vas a creer lo que encontré, este lugar es el paraíso de las oportunidades. Nadie usa zapatos. ¡Le puedo vender al país entero!
La manera en la que valoramos los problemas es lo que nos lleva a tener éxito en lo que emprendemos, porque recordemos la frase tan trillada pero cierta: hay dos formas de ver el vaso, medio lleno o medio vacío. Esto no quiere decir que dejemos de ser realistas, simplemente podemos enseñarle a nuestra mente a abrirse, a ser positiva, para de esta manera transformarnos en una persona más intuitiva y creativa para vivir las circunstancias adversas como lo que son, eventos que teníamos que vivir, momentos que pasaron de los cuales seguramente hay algo que aprender. Rápidamente hagámoslo y demos vuelta a la página para así vivir más relajados.
Por eso, a partir de hoy podemos proponernos que cuando iniciemos con una nueva actividad –empleo, estudio, deporte, amigos, hobby- o enfrentemos un cambio de vida –
-matrimonio, separación, viaje, casa nueva- mantengamos una postura de mente abierta y estemos alertas para eliminar todos aquellos sentimientos que nos lleven a decir “no puedo”, “esto jamás se logrará”, “no es para mí”, “seguro que no hay lugar”, y decretemos positivo con buena actitud. Lo que no es, haz como si fuera, para que sea.
Recuerda que la rutina es el óxido de la vida, OK!
TOMO No. 82
17 de Noviembre de 2008
Portada: Zac Efron
Entrevista: No Hubo
Carta Editorial: Todo es Actitud (No hubo comentarios)