Si tenemos problemas en la casa o en el trabajo, no podemos comprar el automóvil que quisiéramos, o contamos con pocos amigos, es muy probable que pensemos que nuestra vida no es abundante.
Pero me encontré con un escrito del psiquiatra y terapeuta argentino Jorge Bucay que me gustaría compartir contigo, y que me hizo reflexionar que en realidad, y aunque no lo parezca, los humanos tenemos abundancia en nuestro diario vivir.
“Cuando nos concentramos en la abundancia, sentimos que nuestra vida está llena; pero si nos fijamos en la escasez, creemos que está repleta de carencias. Todo depende simplemente de dónde centremos nuestra atención.
“Te recomiendo que escribas para ti un libro de la abundancia: cada noche, antes de acostarte, anota por lo menos 50 cosas maravillosas que te hayan ocurrida en el día. Dirás: ¡Vamos! ¿50?, si difícilmente logro encontrar tres´. Es obvio que no te has fijado en las bendiciones y bienes de tu vida, y la finalidad de este ejercicio es ayudarte a hacerlo.
“He aquí algunos ejemplos que podrías anotar: Esta mañana arrancó el coche. Soy capaz de caminar. Tengo alimentos para comer. Alguien me hizo un elogio. Mis hijos no se metieron en ningún lío. Sentí el calor del sol en la cara. Hablé con una de mis mejores amigas. Las flores están comenzando a abrir. Tengo agua caliente para ducharme. Estoy respirando.
“Los detalles que anotes en tu libro no tienen por qué ser brillantes y sensacionales; en realidad, es mejor que no lo sean, pues de otra manera, gran parte de nuestra vida parecería triste, y eso desde luego no es cierto.
“Al principio, encontrar esos 50 motivos por los cuales dar gracias te va a llevar muchísimo tiempo, pero muy pronto, las cosas buenas van a llover sobre el papel, porque te pasarás gran parte del día buscando bendiciones que puedas añadir a tu libro. ¡Y las encontrarás!.
Si logras adquirir el hábito de fijarte en la abundancia, tu vida se transformará, OK!
TOMO No. 64
14 Julio 2008
Entrevista: No Hubo
Carta Editorial: ¿Dónde Centras tu Atención? (Ingrid Martz, Lisardo, Sara Maldonado)