La buena organización

La semana pasada tuve que hacer un trámite administrativo,  y según yo todo estaba bien. Cual sería mi sorpresa al darme cuenta de que no era así, que si tenía unos cuantos papeles en regla, pero otros no, lo suficiente para no poder realizar la gestión.

Por eso, en este año nuevo, uno de mis propósitos es tener todos mis papeles actualizados, ordenados y colocados en un lugar especial.

Es desesperante buscar un documento y no encontrarlo. A quién no nos ha pasado que a la hora de vender una casa, un coche, viajar o hacer algún trámite, os damos cuenta de que no tenemos todos los documentos  en orden, y para conseguirlos necesitamos tiempo y dinero.

También, de repente suele pasar  que dejamos las cosas en cualquier lugar o las guardamos tan bien que nunca las encontramos,  por lo que no está de más sentarnos a revisar con calma todos nuestros documentos y ponerlos en orden a la mayor brevedad posible para no dejarlo al olvido nuevamente.

Por precaución se me ocurre tener una copia  de los papeles y números de cuenta más importantes en otro sitio que no sea la casa, por ejemplo: la oficina, con una hermana, etc.

El orden y la organización son buenos compañeros que nos traerán beneficios, siempre y cuando no caigamos en situaciones obsesivas, porque en ese caso ya no sé qué es peor.

Por eso, es importante que no dejemos para mañana lo que podemos hacer hoy, OK! 

 

 

TOMO 38
14 enero 2008
Portada: Edith Gonzalez
Entrevista: Juan José Origen
Editorial: La buena organización (César Evora, Michelle Vieth, Manuel Ojeda)