Cuenta una parábola que un hombre y su mujer salieron de viaje con su hijo de 12 años que iba montado sobre un burro. Al pasar por el primer pueblo, los habitantes comentaron: “Miren a ese chico maleducado, monta sobre el burro mientras sus pobres padres van caminando.” Entonces, la mujer le dijo a su esposo: “No permitamos que la gente hable mal del niño. Sube tú al burro”.
Al llegar al segundo pueblo, la gente murmuró:
“Qué hombre tan sinvergüenza, deja que la criatura y la pobre mujer tiren del burro mientras él va cómodo encima”. Entonces decidieron subirla a ella en el burro mientras padre e hijo tiraban de las riendas.
Al pasar por el tercer pueblo, la gente exclamó: “¡Pobre hombre! ¡Después de trabajar todo el día debe llevar a la mujer sobre el burro! ¡Y pobre hijo! ¡Qué le espera con esa madre!”.
Entonces acordaron subirse al burro los tres y continuar su viaje. Al llegar a otro pueblo, la gente dijo: “¡Pero qué familia, son más bestias que el burro que los lleva! ¡Van a partirle la columna al pobre animal!”. Al escuchar esto, decidieron bajarse y caminar junto al burro. Pero al pasar por el pueblo siguiente la gente les volvió a increpar: “¡Mira a esos tres tontos: caminan cuando tienen un burro que podría llevarlos!”.
Me gusta esta historia porque ejemplifica muy bien lo inútil e imposible que es tratar de quedar bien con todo el mundo. La crítica destructiva no debe detenernos, pues si hacemos lo que el corazón dicta y luchamos a diario para realizar nuestros sueños sin afectar a nadie, seguro que estaremos haciendo lo correcto.
Y así, al final, contaremos con nuestra propia aprobación, que es la que realmente importa.
TOMO No. 108
15 Mayo de 2009
Portada: Patrick Swayze
Entrevista: No Hubo
Editorial: Imposible Quedar Bien con Todos